El sistema 4Drive se ha introducido a lo largo de estos años en un gran número de modelos de la gama SEAT y es uno de los sistemas de tracción integral más seguros y avanzados del mundo.
El conjunto mecánico de tipo Haldex está situado sobre el tren trasero, justo delante del diferencial posterior, que conecta ambos diferenciales, el delantero y el trasero, y consiste en una serie de discos bañados en aceite y una unidad de control electrónico que analiza el comportamiento dinámico y las demandas del conductor. Una vez interpretada la información, la unidad de control acciona el conjunto hidráulico, que genera la presión de aceite suficiente para comprimir los discos del embrague y controlar el resbalamiento de los mismos, haciendo todas las variaciones pertinentes sobre la marcha. Los discos de fricción están dispuestos en pares, uno de cada pareja está permanentemente unido al árbol de transmisión, y el otro disco gira junto al diferencial del eje trasero.
Para compensar las ligeras variaciones de longitud generadas por la flexión de los elementos elásticos que sujetan ambos ejes, hay dos juntas flexibles en ambos extremos del árbol de transmisión y un manguito deslizante en el centro del mismo. Al no necesitar un acumulador de presión, el sistema es más ligero y presenta un mejor tiempo de respuesta, aumentando así la seguridad activa y garantizando el dinamismo en todo momento.
La posición del embrague Haldex sobre el eje trasero aporta dos grandes ventajas: conseguir un mejor reparto del peso del conjunto del vehículo, y reducir la inercia y el tiempo de reacción del sistema, ya que el cardan gira constantemente al estar siempre en contacto con el motor.
El sistema transmite el par motriz a las ruedas traseras sólo cuando las necesidades dinámicas del vehículo así lo requieren. 4Drive analiza en tiempo real el estado de la vía, la velocidad del vehículo, la de cada rueda, la posición del volante, el modo de conducción seleccionado, así como el estilo de conducción que el conductor imprime en cada momento, para distribuir el par motor de forma rápida y progresiva en cada una de las ruedas cuando sea necesario.
En condiciones de circulación rutinarias, el sistema 4Drive se comporta como un vehículo de tracción delantera. La transmisión de par al eje trasero es totalmente automática, no requiere de la intervención del conductor y trabaja de forma combinada con otras gestiones del vehículo, como por ejemplo los frenos o el motor.
En conducción deportiva o sobre superficies resbaladizas, la gestión puede determinar la necesidad de transmitir par a las ruedas traseras según las condiciones instantáneas de circulación, garantizando la seguridad en todo momento, además de una gran mejora en la forma en que tracciona.